Una semana después del momento que me embaracé, me empecé a sentir hinchada. Era muy incómodo, me sentía hinchada todo el tiempo y yo nunca me sentía hinchada, ni un poco. Además, me salieron hongos vaginales muy suaves, y entre todo lo que leí a otras personas también les pasaba: a los 7 días (o algo así) de la concepción, ocurre que en algunos casos aparecen hongos. La cosa es que fui al doctor (por los hongos, a esa altura no sospechaba un embarazo) una semana después de las molestias. Además de los hongos que sospechaba, me encontró un quiste de 5 cm... se rió y me dijo que no era nada terrible y que era benigno. A causa del quiste, me preguntó si me sentía hinchada y me dijo que me llegaría luego la regla porque mi útero se veía lleno. Claro que antes me preguntó si habían posibilidades de un embarazo a lo que le respondí que no porque de verdad creía que no había nada de qué preocuparme. Me dio el tratamiento correspondiente y me fui.
A la semana los hongos me molestaban menos pero no se habían ido totalmente, sin embargo seguía muy hinchada y nada de regla. A esa altura tenía dolor en las pechugas notorio, el cual se fue incrementando a medida que pasaban las semanas. Siempre pensé que sería del tipo de mujer que vomita mucho, y por eso me mantuve tranquila respecto a un embarazo, ya que jamás sentí asco.
Una semana después, un sábado en la noche que venía llegando de varios días de celebraciones, decidí hacerme un test de embarazo solo para descartar totalmente que estaba embarazada, y allí vi que habían 2 líneas. Estaba embarazada. Histérica, obvio, llamé a mi ex y le dije lo que pasaba. Que trajera más tests, muchos tests!! Llegó a la media hora después y me los hice todos y todos tenían 2 líneas, es decir: estaba embarazada.
Siempre creí que era tan difícil embarazarse, que las probabilidades eran muy bajas, especialmente de la forma que yo me había "protegido" (sin condón un rato y después con). Sentía que era algo tan lejano a mí, que no me ocurriría. Por lo mismo nunca pensé acerca del aborto, pero siempre supe que no haría algo que no quisiera.
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